Del artículo “Los cuatro caminos con los que Francia busca duplicar el uso de biocontrol a 2030“, de Felipe Aldunate, publicado en Redagrícola.
En una iniciativa liderada por IBMA Francia, se pretende que el 30% de toda la protección de cultivos francesa se realice con productos biológicos en 2030, en una combinación creciente con bioestimulantes.
Para conseguirlo, se están siguiendo cuatro estrategias:
- Acceso a la innovación acelerando la comercialización de los productos de biocontrol.
- El apoyo al biocontrol por parte de las administraciones (en Francia y en Europa), un gran desafío puesto que una innovación en biocontrol puede llegar a tardar entre siete y diez años a comercializarse, debido a las normativas de registro en Europa.
- El desarrollo de cursos de formación en biocontrol para los agricultores.
- Información precisa y permanentemente actualizada sobre el biocontrol.
La importancia de esta iniciativa crece en un contexto de cambio climático cuyo impacto ya se siente sobre las poblaciones, los insectos, las enfermedades y las malas hierbas. En una entrevista, Céline Barthel, presidenta de IBMA Francia, indica que “Las empresas de biocontrol van a tener que hacer frente a estas evoluciones para aportar soluciones adecuadas”, y añade que las soluciones basadas en organismos vivos también deben adaptarse a las nuevas condiciones climáticas, y que en este contexto, se necesitarán otras soluciones añadidas, los bioestimulantes.
Comercial: obtener bioestimulantes